lunes, 9 de febrero de 2009

Paseo por la memoria


Anoche, mientras daba un paseo por las calles olvidadas de Hornachuelos, refiriéndome a esas que pertenecen al casco antiguo y que por su delgadez no permiten el paso de vehículos ni casi de personas, una extraña sensación se apoderó de mí trasladándome emocionalmente a un pueblo más antiguo y retrocediendo a la década de los años ochenta. Eran aquellos años en los que jugaba por aquellas callejuelas que ahora ya no frecuento.
Durante esos agradables momentos en los que volvían a mi memoria imágenes, olores y recuerdos bañados en el almíbar de la nostalgia, me crucé con un joven de esos que catalogamos dentro de las especies raras porque se comporta fuera de lo establecido. Los cánones que rigen su forma de vida no se recogen en las normas habituales ni comunes; sus sinceras palabras y libres expresiones provocan dolor de oídos a los poderosos que administran nuestras vidas, y aprobación escondida a los que viven subyugados bajo la intolerancia del poder.
Al igual que ellos que se enfrentan día a día con su dura realidad, yo voy subiendo la empinada y larga escalereta que me lleva a la Plazoleta del Horno. A cada escalón que me exige un duro esfuerzo, fácil de evitar escogiendo un recorrido alternativo por La Puerta de La Villa, respondo con firmeza y sin titubear consciente de que, cada paso que recorra en el duro camino al que me enfrento, me será recompensado al subir el último escalón con la satisfacción de lograr finalizar un recorrido lleno de dificultades, que siempre será mayor al del recorrido llano y fácil. Quien es capaz de vencer la máxima dificultad, reducirá sus miedos porque lo por venir será fácilmente dominado.
Algún día me iré a vivir a alguno de esos manicomios en los que te encuentras a esos locos que lo dan todo por pertenecer a cuerpos de voluntariado; que hacen del mantenimiento de un club o asociación su filosofía de vida; que, calladamente, ayudan a mantener el pulso diario de nuestra comunidad; y, en definitiva, que se empeñan en dedicar sus fuerzas, tiempo libre y de familia, recursos económicos… en favor de una sociedad ingrata que los maltrata por el mero hecho de comportarse de manera diferente.
Foto: Voluntarios dedicando su tiempo libre a los inmigrantes que cruzan el Estrecho de Gibraltar.

3 comentarios:

  1. RAFA, EL RESULTADO DEL ASPECTO DE ABANDONO DE LA PARTE ANTIGUA DEL PUEBLO ES EL RESULTADO NATURAL DEL CRECIMIENTO DEL MISMO HACIA SAN BERNARDO, COSA NATURAL YA QUE NO PUEDE AMPLIARSE HACIA OTRO SITIO DEBIDO A LA OROGRAFÍA CIRCUNDANTE.
    A ESO HAY QUE SUMARLE QUE LA JUVENTUD, POR DESGRACIA, SE VA TENIENDO QUE IR A BUSCAR LA VIDA FUERA DE HORNACHUELOS (NO VOY A ABUNDAR EN REDUNDANCIAS) CON LO QUE LA REDUCCIÓN DE POBLACIÓN ES CADA AÑO MÁS NOTORIA.
    SIN EMBARGO UN AMIGO COMÚN ME DIJO UN DÍA, QUE HORNACHUELOS ACABARÁ SIENDO EL ÁREA DE DESCANSO DE CIERTAS POBLACIONES LIMÍTROFES. NO ME GUSTÓ LA REFLEXIÓN, PERO SI SE PIENSA DETENIDAMENTE Y, HABIDA CUENTA DE LA DERIVA A LA QUE LOS ACONTECIMIENTOS ARRASTRAN AL PORVENIR DEL PUEBLO, Y SI ES UNA VÍA DE SALVACIÓN PARA EL MISMO, QUIZÁ SEA MOMENTO DE PENSAR AQUELLO DE MÁS VALE PÁJARO EN MANO..............NO CREES????

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  2. LLevas toda la razón. No obstante, no creo que el principal problema de Hornachuelos sea que se dirija hacia el abandono y desaparición. Me temo que el verdadero problema es que la población va descendiendo vertiginosamente, y pronto nos veremos obligados a mantener los 4000 que quedemos una infraestructura para 6000 habitantes.
    Lo más preocupante es que a nadie le importa, ni nadie hace nada por evitarlo.

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  3. HOLA RAFALIN, EN PRIMER LUGAR QUIERO DARTE LA ENHORABUENA POR TU BONITO BLOG, YA TE VISITARE AMENUDO.
    ADEMAS DE SER UN GRAN AMANTE DEL DEPORTE, PARA MI UNO DE LOS SABIOS,YO HE TENIDO LA SUERTE DE COMPROBARLO Y BENEFICIARME DE ELLO, YA QUE HE ESTADO TODA MI INFANCIA A TU LADO, VEO QUE APARTE DE ESO TAMBIEN ERES UN BUEN ESCRITOR.
    UN ABRAZO DE TU AMIGO KEKE.

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